Difusión a miembros de la OSTC y website oficial www.ordendeltemple.org y Facebook
Gran Pasaje de San Miguel 2022
Como bien sabéis este Pasaje es el de la retribución y así debe ser, es momento de recapitular y hay mucho sobre lo que meditar tras cumplirse los 70 años del resurgimiento de Arginy.
Pasemos a este año. Queremos dar las gracias a todos y cada uno de los muchos simpatizantes que habéis contactado con nosotros, a los que nos animáis a seguir en la línea trazada y a los que quisieran ver mayor avance.
Lamentamos y esperamos que comprendáis que es materialmente imposible responder, de forma personal, a todos los que contactáis con la OSTC , lo que si os garantizamos es que todas las comunicaciones que nos llegan son leídas con mucha atención y muy valoradas.
Hay algo que muchos grupos no entienden y esperamos que sean capaces de ver un día la realidad.
Hemos querido dejar para este comunicado la contestación a quienes nos interpelan con una pregunta muy meditada, ¿Por qué no actuamos más duramente contra la iglesia?, pues bien, en su día se interpuso una demanda contra el Papa, el Temple nunca ha estado sujeto a la jerarquía eclesiástica, únicamente reconocemos la autoridad del Papa, ya que solo él, es el vicario de Cristo en la tierra, le pedimos cada mes la rehabilitación de la Orden y vemos con pesar que la respuesta es nombrar obispos que se pongan al frente de grupos neotemplarios, el Temple no nace de la intención de los hombres, siempre ha sido cosa de Dios, nunca desistiremos de nuestra meta, limpiar el nombre del Temple y que se reconozca el error cometido con los templarios, ante toda la IGLESIA, es decir la comunidad de los seres humanos.
Otra pregunta para la que hemos dejado la respuesta a este momento es la de aquellos que nos dicen que porque queremos la unión de Islam y Cristiandad, esa es otra de las metas de la Orden desde siempre, por desgracia como seres humanos y en el tiempo que nos ha tocado vivir, estamos predispuestos a magnificar las diferencias que nos separan en lugar de profundizar en lo común que nos une, en la confesión que precede al Oficio templario decimos “he pecado olvidando que mi enemigo es también tu hijo y lo he despreciado en lugar de conducirlo con paciencia y amor a reconocer que en Jesús-Cristo solo es posible el amor y el perdón”, podéis meditarlo.
A quienes nos preguntan de la manera más inocente ¿Qué esperamos en esto del Temple?, pues si leéis el evangelio encontráis “no puede el siervo esperar ser tratado mejor que a su señor”, en la oración a San Miguel, durante el Oficio decimos “… soldados de Cristo esperemos la muerte como al amanecer se contempla la aurora, después…”, poco más que decir de lo que esperamos.
El ritual del Oficio es un pozo de sabiduría que contiene todas las respuestas a cualquier pregunta que nos podamos hacer, desde el principio hasta el final.
Los esqueletos que se guardan, al final, acaban por salir y la iglesia oficial tiene armarios llenos, ha de llegar el día, cuando Dios quiera, que el Papa recibirá la inspiración del Espíritu y la Iglesia de Pedro volverá a su camino.
¡Todos armados de fe por dentro y de hierro por fuera!
El Colegio de oficiantes de la OSTC